Soplillo, Nicolasito… decenas de enanos en la corte de los Austrias
En las rutas teatralizadas es frecuente ver como aparece un enano haciéndose pasar por el Rey, sin desvelar mas de esa ruta hoy nos centramos en arrojar un poco de luz sobre la historia de los enanos en la corte:
¿Cómo cobraban?
Nadie podía ser nombrado enano en un contrato formal y no todos eran pagados de la misma manera, unos cobraban en cera, en pan o en vestidos y algunos sólo acompañaban a la corte en algunos viajes donde se hacían necesarios para el entretenimiento.
Así es el caso de Bautista el del ajedrez, imprescindible en los viajes de Felipe IV.
Sabías que hubo famosos espías enanos…
Enanos y locos en la corte ha habido en todas las épocas pasadas, pero los de los Austrias no se presentan exagerados, locos o incapaces, se presentan como iguales o de forma mas decente. Generalmente eran hombres de placer, pero ni mucho menos todos. Hubo enanos y negros en la marina, en oficios profesionales, consejeros reputados, famosos espías, pues aún en una época oscura en derechos humanos, eran uno mas.
Los borbones desterraron a locos y enanos, pero no a negros.
Los Borbones desterraron a locos y enanos de la corte pero se quedaron con los negros y gustaban como los Austrias de ponerles nombres de la familia Real como el caso de Alfonso Carlos de Borbón, negro y arquitecto en tiempos de Carlos III.
Muchos enanos despertaron grandes envidias…
Los negros y enanos de corte tenían maestros a su disposición que los enseñaban a leer y a escribir.
Hubo muchos que tuvieron mucha envidia a estos enanos pues eran muy queridos por sus amos. No es noble y suena repulsivo, pero estamos hablando de los siglos XVI a XVIII.
Razón no les faltaba porque alguno abusaba de su puesto de confianza o fueron muy favorecidos, este es el ejemplo del bufón de Felipe II Miguel de Antona quien recibió tierras, títulos y hasta escudo nobiliario. Este último será el protagonista en la primera escena de la Ruta Teatralizada Aranjuez 4D, no podía faltar como símbolo clave de la teatralidad cortesana.
¿Os gusta fotografiaros con vuestro amigo el feo?
Cabe destacar que los enanos no solo divertían sino que hacían mas guapo a quien les rodea, un recurso bajo que formó parte de la idiosincrasia de la época y que por ejemplo hizo mas guapa a la infanta en Las Meninas sin apenas darnos cuenta.
Los textos no diferenciaban entre locos y enanos
Es muy curioso lo que nos cuenta Jose Moreno Villa en su estudio de 1939, donde nos dice como para los nobles no había diferencia entre locos o enanos y que ellos probablemente no sabrían si lo serían.